Jetour Dashing

La llegada de marcas chinas al mercado argentino ya no es novedad. Pero algunas, como Jetour, parecen dispuestas a jugar en serio. El Dashing es uno de los SUV más llamativos y tecnológicos de su franja de precio, y lo probamos durante 4 días, incluyendo un viaje a la costa para ver cómo se comporta fuera del asfalto.

Diseño

Imposible que pase desapercibido. El Dashing tiene un diseño rupturista, con líneas afiladas, luces tipo boomerang y una parrilla gigante que le da presencia. Se nota que Jetour quiere captar miradas, y lo logra. A eso se suman llantas grandes, detalles en negro brillante y una silueta que combina lo deportivo con lo futurista y de la mejor manera posible porque el resultado es sencillamente perfecto. No será del gusto de todos, pero definitivamente impone. Llama la atención a donde quiera que vayas e incluso es probable que se te acerque alguien a comentarte/preguntarte algo del auto.

Motorización y transmisión

El Jetour Dashing se ofrece con un motor 1.6 turbo de 197 CV y 290 Nm, asociado a una caja automática de doble embrague (7 marchas). No hay versiones 4x4, pero sí modos de manejo y una calibración que busca eficiencia y respuesta. Si bien tiene muchos caballos, el motor mueve de forma correcta al auto, tampoco sobresale por sentirse excesivamente ágil. De todos modos cumple y bien. A bajas velocidades, la caja automática presenta algunos tirones típicos de este tipo de transmisiones. Después hace los cambios de manera correcta e inteligente, nada se siente demasiado lento, pero tampoco demasiado rápido. La caja se comanda desde una palanca ubicada a la derecha del volante, en la columna de dirección. Muy al estilo Mercedes Benz, es de accionamiento eléctrico así que también hay que acostumbrarse un poco a eso. En ciudad se mueve con soltura y en ruta es sólido: buen aplomo, dirección asistida suave y consumo razonable (promedió unos 9,5 L/100 km en uso mixto). En arena y con las imperfecciones de los caminos de este tipo, la Dashing priorizó siempre el confort y se movió con total facilidad, pero siempre manifestando este rebote que se ve compensado por contar con un eje trasero independiente.

Equipamiento de seguridad

Ofrece una buena dotación: 6 airbags, control de estabilidad, cámara 360, monitoreo de punto ciego, sensores, y asistencias a la conducción (ADAS). La marca aún no tiene pruebas Latin NCAP disponibles, pero la plataforma es nueva y pensada para cumplir normas internacionales. No encontré la forma de subirle el volumen a la alerta de punto ciego por ejemplo, que me hubiese gustado que sonara un poco más fuerte y no con una melodía agradable sino algo que me llame más la atención. Lo bueno del interior con luces led es que no son solo decorativas sino que también funcionan como refuerzo de algunas asistencias. Por ejemplo, para el tráfico cruzado, cuando pasaban autos por el costado del auto y vos ibas a abrir la puerta, se iluminaba todo el lateral involucrado, en color rojo.

Tecnología

El interior es un festival de pantallas, luces y superficies. El instrumental y la pantalla en esta ocasión no están integrados, sino que todo lo contrario, bien diferenciados. Por un lado tenemos una pantalla bastante reducida en dimensiones con relativamente poca información para todo lo que es el instrumental, considero que le hubiese puesto más enfasis en cierta forma de mostrar los parámetros del auto (un cuentarrevoluciones convencional por ejemplo). Hay comandos táctiles, comandos por voz, cargador inalámbrico, cámara 360 (y hasta de más grados), techo panorámico y una iluminación ambiental personalizable que hace que manejar de noche sea una experiencia distinta. La principal protagonista del interior es su pantalla de 15” desde donde se maneja absolutamente TODO y cuando digo TODO es TODO. Ahí entra mi conflicto, si bien 4 días es poco para superar la curva de aprendizaje, considero que hay funciones que no deberían dejar contar con un botón físico. Mover los espejos o configurar las luces exteriores del auto requieren que pases por algún menú de la pantalla y esto no me parece la solución más alegre, el climatizador lo puedo llegar a comprender. Como todo auto chino, tiene mil formas de configurarlo, lo que es increíble pero también abrumador cuando queremos encontrar alguna función específica, puede tomar varios minutos y a veces eso, durante la conducción puede ser MUY molesto. El sistema de cámaras funciona correctamente aunque a veces presenta cierto delay para mostrarse en pantalla, dejándote un poco a la deriva en ese momento tan dramático donde uno quiere estacionar semejante SUV de volúmenes tan exagerados. Los materiales combinan cuero sintético con plásticos blandos y algunos detalles en negro piano. La presentación en general es superior a lo que vemos en otros modelos del segmento. Algo que me llamó la atención fue el nivel de ajuste de los materiales en su interior, incluso en caminos disparejos o en adoquines, no se escuchaba prácticamente ningún grillo.

Funcionalidad

El Dashing es un SUV amplio: cinco adultos viajan cómodos y el baúl es generoso. Las plazas traseras tienen salidas de aire y un solo puerto USB. La posición de manejo es alta (creo que incluso demasiada), con buena visibilidad y múltiples ajustes. Ideal para la ciudad y también para la ruta. Hay que tener en cuenta que las butacas delanteras son calefaccionadas y refrigeradas y que los ajustes eléctricos se pueden comandar con botones físicos o desde la pantalla. La suspensión es blanda, lo que favorece el confort, aunque puede sentirse algo barca en maniobras rápidas. Pero en uso familiar, es más virtud que defecto. Lo que perjudica un poco el confort de marcha es la configuración de cubiertas/llantas que son de 20” y aunque tiene un buen talón, provoca que el auto frente a imperfecciones, sea bastante saltarín. En caminos que están en perfecto estado, la Dashing simplemente se desliza con absoluta suavidad.

Conclusión

El Jetour Dashing no es “un chino más”. Tiene diseño, tecnología, espacio, y un motor que responde. ¿El desafío? Construir confianza de marca, algo que lleva tiempo. Pero como producto, es competitivo, distinto y más completo que muchos rivales que ya conocemos. Probamos el Dashing durante 4 días y nos dejó una sensación clara: Jetour no vino a probar suerte. Vino a pelear fuerte en el segmento SUV.